El Sistema Damon ha revolucionado por completo la ortodoncia actual.
Se trata de la utilización de brackets de autoligado pasivo que, combinados con arcos ligeros de alta tecnología, crean un sistema de baja fuerza y baja fricción que permite que el movimiento dental sea más rápido y más confortable.
Entre las ventajas a descatar de este método están:
Con este sistema se elimina la necesidad de utilizar ligaduras elásticas o metálicas, y se consigue una mejora de la estética facial espectacular.
Con el Sistema Damon no solo alineamos los dientes, sino que creamos unas sonrisas preciosas. Su ortodoncista Damon tiene en cuenta una serie de factores cuando realiza el diagnóstico inicial de su sonrisa.
La cara, el perfil y otros factores de cada persona son importantes para prever el aspecto que esta persona tendrá a los 40, 50 o 60 años. El Sistema Damon está diseñado para que los resultados sean para toda la vida.
El tratamiento con el Sistema Damon suele durar mucho menos que con aparatos convencionales. Además durante el tratamiento, el numero de citas suele ser menor.
No. Lo que hace que el Sistema Damon funcione tan rápido es el hecho de utilizar fuerzas mucho más suaves, más respetuosas con la biología del paciente que los aparatos convencionales.
La baja fricción del sistema garantiza la corrección de la posición de los dientes y la mejora de la harmonía facial.
Se utilizan arcos de titanio muy ligeros, con memoria de forma, que guían los dientes a su posición ideal. Las molestias se reducen considerablemente.
¡Ya no! Los brackets son mucho más pequeños de lo que solían ser hace unos años, y en la actualidad se utilizan nuevos materiales que hace que sean muy discretos.